Dos aldeas, La Gila y Tolosa, destinadas a entenderse y comunicarse mediante estos dos senderos históricos divididos y unidos a la vez por el amigo río Júcar.
Las Casillas de Tolosa, en el llano, hoy dominadas por la ganadería a gran escala, era una urbanización rural dedicada a proveer cobijo a los animales domésticos de sustento gastronómico, a la extracción de aguas subterráneas para los animales, plantas y personas, pastoreo, transformación y almacenaje de recolecciones agrícolas de antaño. Convenientemente comunicada con Tolosa, la aldea capital, donde vivían los usuarios de las denominadas casillas. Está orientada al mediodía en la ladera de la colina de bajada desde la planicie, con sus calles retorcidas y empinadas, y con los corrales y dependencias que en la parte alta nos encontramos al navegar por este sendero que es un camino ancho y con poca pendiente que permitía transporte con animales de tiro y carretas.
La Gila una pedanía también de tipo rural agrícola-ganadera, asentada en el llano que cuenta con más facilidades de uso para disfrute de la vida cotidiana. La senda que sube desde el puente a la propia aldea, es de las auténticas, para no circular en paralelo y apta para animales de carga en fila india. Estos caminos unen socialmente a estos moradores, sus familias, sus amistades, amores y desamores que surgen aun de las fiestas y bailes que se celebran en ambas. De noche se observa desde la lejanía el camino de farolillos que producen las linternas de bajada y de subida, cuando ya acostado el sol y colgados los aperos, hombres y mujeres se asean y acuden al encuentro de la verbena popular.
SALIDA DESDE LAS CASILLAS DE TOLOSA.
EL CERRO DEL CABEZO PRESIDIENDO.
LOS TÍPICOS POZOS DE TOLOSA CON CASETA Y PUERTA INCLUIDA.
YA SE VE A TOLOSA DESCANSANDO EN LA LADERA.
DESGASTE CÁRSTICO.
EL ZIG ZAG DE LA SENDA.
UNO DE LOS CORRALES ABANDONADOS.
APUNTALAMIENTO DE LAS ROCAS.
VOLADIZO DE CALIZA.
MARCAS DE LA SENDA.
LA SOMBRA DE LOS SENDERISTAS EN LA CALZADA EMPEDRADA.
REPARACIÓN DEL CAMINO EN PLENO REGUERO.
EL CORRAL DEL PINO.
CALLEJAS Y CALLEJONES.
LA MORADA DEL POBRE CERDO.
LUGAREÑA EN SUS QUEHACERES.
JARDÍN VERTICAL.
LAS CALLES EN CUESTA DE LA PEDANÍA.
RESPIRADERO A MODO DE CONFESIONARIO.
VIVIENDAS DE TOLOSA.
LA FUENTE QUE INVITA AL DESCANSO A LA SOMBRA.
EL PUENTE Y EL PANTANO.
LA TELA DE ARAÑA.
HORMIGUERO EN RESTAURACIÓN TRAS LA ÚLTIMAS LLUVIAS.
EL VERDOR DEL AGUA CONTRASTA CON LA BLANCURA DEL ENJALBIEGUE.
HELECHOS.
PIEDRAS COLOCADAS ADREDE PARA HACER LA CALZADA.
TOLOSA EN LA RIBERA DEL RÍO.
CANTERA DE LA OBRA HIDRÁULICA DE DON BENITO.
HUELLAS DE LA BASE DE LOS RAÍLES DE LA VAGONETA DE LA CANTERA.
UNA PIEDRA EN EL CAMINO.
PRESA DE LA CENTRAL DE DON BENITO.
LLEGADA A LA GILA.
ANTIGUO SALÓN DE BAILES.
AVENIDA DE LA CARRETERA.
ERMITA DE SAN ANTONIO.
BIFURCACIÓN LAS ROCHAS - LA GILA.
TOLOSA LA NUIT.
FLORES DE SAN PEDRO.
ERMITA DE SAN ROQUE.
Interior de la ermita y Cristo barroco popular.
El denominado Cristo original de Tolosa se quemó en la Guerra Civil Española. Pertenecía la la familia de los Tolosa que tenían muchas propiedades y dieron también el nombre a la aldea. Además el Cristo tenía una ubicación fija en la Iglesia de San Andrés en Alcalá del Júcar.
LAVADERO DE TOLOSA.
