DESDE LA BOCACEJA
A LA TERRERA Y AL RETORNO. UN RECORRIDO PARA POBLAR EL CEREBRO DE
HORIZONTES MONTAÑOSOS, DE TRANQUILIDAD Y DE NATURALEZA VIVA Y PURA.
El aprovechamiento de la fuerza del agua para ayudar en las faenas cotidianas del hombre ha sido una constante desde siempre, el antiguo molino de la Terrera es un claro ejemplo de ello. Igualmente, quedan restos de su utilización en la obtención de energía eléctrica en las centrales, ya en desuso, del Retorno y de la Terrera.
Salimos de la
plaza de la Constitución de Casas Ibáñez dirección noreste, bajando la calle Mayor
y siguiendo las conchas del camino de Santiago, nos encontramos con la Calle de
la Tercia, llamada así por encontrarse en ella la casa de la Tercia donde se recogía en dinero o en especie una parte de loas ganancias o de las cosechas. El nombre de «tercia» viene de un impuesto de los poderosos de entonces en el que dividían los diezmos (décima parte de los productos o su correspondencia en valor) en tres partes, en tres tercias o tercios. También está relacionado con el Pósito Municipal que recogía el trigo para que no faltase pan a la población. Al final de esta
calle nos topamos con la obra del
insigne pintor y escultor local, Serzo, “La Faroletra”, que da nombre a la
rotonda, y siguiendo el paseo de la Cañada, que verdaderamente es, desde
la antigüedad, un paso de ganado y de agua. En sus inmediaciones nos encontramos con la calle
Molino que dirección norte, lleva al antiguo molino de La
Terrrera, que luego se convirtió en una central hidroeléctrica.
PLAZA DE LA CONSTITUCIÓN. Plaza del mercado de abastos.
Bajada por la calle Mayor, la calle que normalmente en las ciudades, alberga comercios y bares y lleva a la plaza del mercado. La perpendicular a la calle Mayor; que se ve en la imagen, desemboca en la calle Pósito, por lo ya citado del Pósito Municipal.
Nos topamos con
la Calle la Tercia en la que nos aparece una indicación del Camino de Santiago.
"La Faroletra" del artista local Jose Luis Serzo.
Pozo que demuestra
que por aquí, por la Cañada, discurren aguas, ahora subterráneas.
En el Paseo de La
Cañada nos seguimos encontrando con las indicaciones del Camino de Santiago.
Ruta de Levante.
Inicio de la ruta. Se puede hacer a pie, en bici, moto o en coche, dependiendo de la edad y de la experiencia en senderismo. Se recomienda ir en coche haciendo paradas en la Bocaceja, en el Mirador, La Terrera y el Retorno, y después saborear a pie las grandezas de este paisaje y su riqueza. El recorrido completo hasta el Retorno tiene una longitud aproximada de 17 km. Se ven en el trayecto muchos caseríos debido a la población de hortelanos del siglo pasado, algunos en estado de abandono y otros convertidos en chalets.
Chozo del muro. "La Bocaceja" se le llama a este punto en el que desde lo alto, como si de la ceja del ojo se tratara, podemos divisar la depresión orográfica que produce en fin de la meseta Castellana en su parte sureste.
Desde la Bocaceja se divisa la Sierra del Rubial y el Monte Moluengo de la Venta del Moro
TERMINADO EN EL AÑO 1924.
PRIMERA BIFURCACIÓN, TABAQUEROS - LA TERRERA.
Curva del Muro. Debido a la pendiente de
la orografía y las lluvias, los caminos y sendas se deterioraban constantemente
y en este punto del camino hubo que construir un muro con sólidos cimientos y dar forma a la curva
en pendiente para hacerlo accesible, creando una curva sostenida a base de piedra y cemento.
El Balcón del Ensueño. El río Cabriel al estilo de las películas de vaqueros.
Recibimiento a modo de castillo.
Compuertas del aliviadero de la central de La Terrera.
A lo largo de este itinerario paralelo al río, nos encontramos con una serie de piedras de gran tamaño que afloran en el cauce dependiendo del caudal. Sirven para localizar zonas de baño o de pesca según el interés de cada uno.
La primera Piedra.
Refugio circular.
Interior del refugio de la Terrera.
Entrada a la sala de máquinas. Hoy es un albergue.
EL RÍO CABRIEL, AFLUENTE DEL JÚCAR, A SU PASO POR LA TERRERA.
Pilar del puente de palos que daba acceso a la Comunidad Valenciana.
Tobogán de la zona de baño de este entorno paradisíaco de la Terrera.
Ojo de buey de la sala de máquinas.
Piedras del antiguo molino utilizadas a modo de mesas.
La fuente.
Pilas de lavar del albergue de recreo.
Balsa de entrada del agua a la central.
Continuamos por la parte derecha de la bifurcación de la carretera que da acceso a La Terrrera hacia el coto de pesca, siguiendo la dirección de la corriente de las aguas cristalinas del río Cabriel.
Segunda Piedra.
Tercera Piedra. Lugar de baño.
Refugio del Retorno y sede del coto de pesca,
Chozo del Retorno.
Central Hidroeléctrica del Retorno llamada así por el meandro tan cerrado que hace el río y parece que el río retorna.
Sala de Máquinas.
Torre Vigía de Forestales y Bomberos.
Meandros del Río Cabriel.
La presa.
Túnel para dirigir las aguas de la presa a la central.
Compuertas de entrada del agua a la Central del Retorno.
Detalle de las ruedas dentadas dela presa.
Si regresamos por la carretera paralela a la de la Terrera,
llamada camino de Requena porque por
ella se accedía antiguamente a Requena, nos encontramos con otro de los chozos
de una serie, que se construyeron en recuerdo a esta construcción tan popular
en la zona.
El Pino Doncel, que ha dado sombra a historias de amor de mozos y doncellas.
